Parashat Nasó
COMUNIDAD

( sábado 2 de junio )
La tan ansiada paz
Esta semana leemos una de las partes más conocidas de la Tora: Birkat Cohanim – la bendición sacerdotal. Esta bendición ha sido adoptada como parte del ritual por distintas religiones y en el judaísmo la decimos en diversas oportunidades.
Esta bendición termina afirmando uno de los valores centrales que D´s le entregó al hombre: la paz. Veyasem leja Shalom – Que D´s te dé la paz (Bemidvar 6:26). Es tan importante este valor de la paz, principalmente en el hogar, que D´s mismo cambió una frase para que no estallara rencilla entre Abraham y Sara. En Bereshit capítulo 18 se narra que la casa de Abraham fue visitada por tres ángeles. En la conversación dice Sara que no puede tener hijos “porque mi esposo es anciano”. Cuando estos mensajeros hablan con Abraham cambian la frase y dicen que Sara expresó: “yo ya estoy anciana”. ¿Por qué modificaron la frase? por la paz! para que los esposos no se culpen entre si responsabilizándose uno al otro por la falta de hijos.
Otro interesante ejemplo con respecto a la supremacía de la paz en el hogar, muestra a D´s dispuesto a que su nombre, escrito en santidad, sea borrado. Cuando un hombre sospechaba que su mujer le era infiel, entonces la llevaba ante el sacerdote quien le daba de beber agua en que se había puesto una serie de escritos en los que figuraba previamente el nombre de D´s (ver Bemidbar capitulo 5).
Así vemos que Shalom en la tradición judía significa también integridad, armonía. Es el ideal máximo. Empezando por la paz en el hogar, nuestro templo sagrado. Aquel que no tenga paz en su hogar, difícilmente la tenga dentro de si. Shabat es justamente el momento de la semana en el cual podemos curar todas las heridas y recomponer todas las relaciones para lograr el tan ansiado Shalom, la tan ansiada paz.
Shabat Shalom!
Rabino Marcelo Kormis
(Fuente La Palabra Isarelita )
Ilustración: chabad.org