Un ardiente ascenso a Jerusalén
COMUNIDAD

Por Ana Luisa Telias
“Cuando llegué a la Tajanat Guivat Mordejai (Estación Central de Bomberos, en Jerusalén), los comandantes eran escépticos a aceptar a un voluntario que no hablase hebreo”, cuenta el ex bombero de la 15° Compañía de Valparaíso, Aarón Morgunovsky.
Residía en Valparaíso. Sin embargo, a los 25 años decidió radicarse en la capital israelí donde alquiló un departamento a pasos de la Ciudad Vieja que le permitiera cumplir con todos sus sueños. “Vine aquí con la idea de ser bombero. No quiero desviarme de mi camino, que es entrar al servicio de Bomberos y de Rescate de Israel, y hacer una carrera profesional”, señala.
Deberes
Si bien dice conocer todos los beneficios con que cuenta en calidad de olé jadash (nuevo inmigrante), como estudiar sin costo un postgrado en universidades israelíes, Aarón prefiere destinar ese tiempo a cumplir con los deberes que demanda el Estado judío a sus ciudadanos, entre los cuales está el de enrolarse en las Fuerzas de Defensa de Israel.
Cuando fue la guerra en Gaza acudió a varias emergencias en plenos bombardeos. Incluso llegó a ciudades como Ashkelon, blindado con chaleco y casco antibalas. “Gracias a mis compañeros pude aprender que una vez que ingresas a servir a la gente, entiendes que expones la vida para que la demás pueda vivir tranquila y no dar el brazo a torcer frente a las diversas muestras de terror”, afirma.
Incendios en Jerusalén
«Una vez que ingresas a servir a la gente, entiendes que expones la vida para que la demás pueda vivir tranquila», sostiene el ex voluntario de la Bomba Israel de Valparaíso.
“Una vez que ingresas a servir a la gente, entiendes que expones la vida para que la demás pueda vivir tranquila”, sostiene el ex voluntario de la Bomba Israel de Valparaíso.
Ser bombero -sostiene- permite trascender conflictos o diferencias entre los seres humanos. Esto lo demostró un incendio ocurrido el 7 de febrero de 2015 en una zona residencial de Jerusalén Este. “Allí nos encontrábamos bomberos judíos protegiendo casas de árabes musulmanes, simplemente pensando en ayudar a las personas”, relata.
El episodio -de gran magnitud- lo tuvo ocupado por cerca de seis horas de un sábado. “El incendio comenzó en un hangar lleno de materiales inflamables (con pinturas, barriles de aceite y tubos de gas). La zona estaba cubierta por un humo negro que me recordó el dantesco panorama de los cerros de Valparaíso…En aquella ocasión quedé atrapado en un punto junto con otros voluntarios, incluyendo las dos unidades de la Bomba Israel… Esa experiencia me ayudó, al igual que a otros compañeros, a reafirmar esta vocación de servicio que me tiene acá en este momento”, admite.
Escalando
En el mega incendio de Valparaíso -2014-quedé atrapado junto con otros voluntarios de la Bomba Israel… Esa experiencia me ayudó a reafirmar esta vocación de servicio», señala. En la foto: Aarón junto a sus compañeros de la Bomba Israel de Valparaíso.
En el mega incendio de Valparaíso -2014-quedó atrapado junto con otros voluntarios de la Bomba Israel, recuerda En la foto: Aarón arriba junto a sus ex compañeros.
Estuvo dos años en la Bomba Israel de Valparaíso. También como secretario de la 15° Compañía se encargaba de vincular a dicho cuerpo con las instituciones judías e israelíes. A los tres días de aterrizar en Israel este joven idealista y apasionado ya pertenecía al servicio de bomberos de la Estación Central de Jerusalén. Aunque generalmente sólo los adolescentes de 15 años sirven como voluntarios en el Cuerpo de Bomberos, ambulancia y Policía, entre otros, como lo exige obligatoriamente el currículum académico en todo el país, Aarón desempeña labores de voluntario y bombero profesional al mismo tiempo, como manejar vehículos y participar en ciertas emergencias.
Empecinado en hacer de este oficio una carrera profesional, Aarón se entrena intensamente para cumplir con las máximas exigencias requeridas y obtener de parte del Ministerio de Seguridad Interior de Israel una plaza profesional dentro de este servicio.
Ser bombero aquí o allá
A diferencia de Chile, donde “lo más importante es la motivación, en Israel es escaso el personal que se ocupa para enfrentar emergencias. Por ende, la labor es mucho más pesada, más completa, lo que explica las altas exigencias físicas, sicológicas y de conocimientos que piden al momento de postular al servicio profesional”, argumenta.
“Un bombero en Israel hace lo que harían cinco en Chile. Debe hacer de todo en las emergencias. La comunicación es muy importante, rápida y efectiva. En los atentados también socorremos y el trabajo debe ser muy preciso, rápido, entendiendo que estamos muchas veces en una situación complicada. Cuando existen explosivos detonados, tenemos la incertidumbre de que pueden haber más. Trabajamos junto a unidades de Fuerzas Especiales del Ejército y la Policía para asegurar el sector. En Chile, en cambio, gracias a que cuentan con gran personal, cada voluntario puede concentrarse en una labor específica”, comenta.
Convicción
La tensión que vivió en 2014, dentro de su primer año de aliá, no lo hizo dudar en ningún instante de asentarse en el país. Si bien estudió en ulpán Etzion y gozó de los beneficios económicos que tiene cualquier nuevo inmigrante judío, aprendió hebreo en las emergencias mientras sus compañeros le pedían que trajera un utensilio y debía saber qué era y dónde estaba. “Sabía que iba a ser difícil, pero vine con la motivación de cumplir mis sueños acá”, asegura.
Luego de cumplir su deber en el Ejército hebreo, Aarón pretende hacer carrera dentro del Servicio de Bomberos y Rescate en Israel, y también acrecentar el lazo con la 15° Compañía de Valparaíso, Bomba Israel.
El ex estudiante del Colegio Hebreo de Viña del Mar, agrega que este establecimiento educacional le sirvió para acercarse muy fuertemente al judaísmo y mantener vivas sus raíces. Quiso ir a Jerusalén cuando comprendió que en ese lugar podría cumplir con tres objetivos: “Vivir una vida plena como judío en lo estrictamente religioso, cumplir con el sionismo y su misión de ser Bombero”, precisa.
Hoy, el primer voluntario judío de la Bomba Israel de Valparaíso en hacer aliá se desenvuelve en hebreo cuando está en servicio y muy orgulloso cuenta de su primer Rosh Hashaná en Israel, cuando sus compañeros de labores le hicieron una ceremonia oficial de bienvenida al cuartel. “Me permitió reafirmar que realmente me encuentro en casa”, destaca.