El flamante canciller británico es un conocido defensor de Israel
Israel

JAI – La nueva primera ministra británica, Theresa May, designó como ministro de Exteriores a Boris Johnson, ex alcalde de Londres, conocido como un político que apoya a Israel y repudia manifestaciones antisemitas como el movimiento BDS.
May también es considerada una gran amiga de Israel y de la comunidad judía británica, y ha calificado al Estado judío como el “el logro de la lucha de muchas generaciones”.
Johnson visitó Israel en noviembre pasado para fortalecer las relaciones entre ambos países, y declaró que Londres “es un socio natural de las compañías israelíes que buscan crecer”.
Durante su visita, Johnson se reunió con líderes israelíes, visitó el Museo del Holocausto-Yad Vashem, participó en un partido de futbol con niños judíos y árabes y fue fotografiado con el intendente de Tel Aviv, Ron Huldai, probando el sistema de alquiler de bicicletas de la ciudad. También abrió un día de negocios en la Bolsa de Tel Aviv.
Johnson manifestó que admira a Israel por su “audacia, valentía y disposición a tomar riesgos con hazañas de extravagantes desatinos”.
Además, el nuevo canciller cargó duramente contra el movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) calificándolo de “académicos izquierdistas pasados de moda”, irritando de esa manera a los palestinos. «No puedo pensar en algo más tonto» que boicotear a «un país que, cuando todo está dicho y hecho, es la única democracia en la región, el único lugar que tiene en mi opinión, una sociedad pluralista y abierta», destacó Johnson.
Luego, en respuesta, varios grupos palestinos se negaron a reunirse con Johnson durante su visita a Ramallah, y se le informó de que sus comentarios habían generado riesgos adicionales a su seguridad en Cisjordania. Sin embargo, su encuentro con el primer ministro palestino Rami Hamdallah, tuvo lugar como estaba previsto.
Fuente: Aurora