Liderazgo palestino: está prohibido normalizar relaciones con Israel
Israel

Por Khaled Abu Toameh
Activistas por la paz, israelíes y palestinos, que esta semana tenían previsto celebrar una conferencia en Jerusalén y Belén, se vieron forzados a cancelarla después de recibir amenazas por parte de palestinos. La conferencia fue organizada por la Confederación Palestino Israelí, grupo que busca promover la paz y la coexistencia entre los dos pueblos. Los organizadores tenían la esperanza de celebrar elecciones para un nuevo «parlamento», constituido por israelíes y palestinos, y que se ofrecería como un tercer gobierno para el gobierno israelí y la Autoridad Palestina.
La primera conferencia, que se suponía tendría lugar en el Hotel Ambassador de Jerusalén, fue cancelada a último momento, después de que airados manifestantes palestinos se congregaron frente al hotel. Los manifestantes gritaban consignas denunciando al evento «porque promueve la cultura de la paz» y está diseñado para «normalizar» las relaciones entre israelíes y palestinos. Gritaban consignas condenando, con energía, al Presidente de la Universidad Al Quds, Sari Nusseibeh, que se suponía sería uno de los principales oradores en la conferencia. Debido a la protesta y por temor a su seguridad, Nusseibeh decidió no ir al hotel.
Luego, los manifestantes palestinos irrumpieron en la sala de conferencias, obligando a los asustados representantes israelíes a abandonar el hotel.
Al día siguiente, una manifestación similar, «anti-normalización», obligó a los activistas por la paz israelíes y palestinos a cancelar un evento programado para llevarse a cabo en la ciudad de Bet Jala, cerca de Belén. Los manifestantes explicaron que su movimiento estaba en línea con la política de la Autoridad Palestina de prohibir cualquier forma de normalización con Israel. Esa es la misma autoridad que firmó los Acuerdos de Oslo con Israel y cuyos principales líderes portan tarjetas VIP, emitidas por Israel, que les permite moverse con libertad – un privilegio negado a la mayoría de los palestinos comunes.
Algunos palestinos dijeron que las manifestaciones fueron, de hecho, iniciadas por altos funcionarios palestinos de Ramallah, que no quieren ver a representantes israelíes y palestinos trabajando juntos para promover la paz y la coexistencia. Mediante la prohibición de esas reuniones públicas, la Autoridad Palestina radicaliza más a los palestinos.
Ésa no fue la primera vez que la Autoridad Palestina, o algunas ONGs, se pronunciaron contra actividades que, supuestamente, promueven la normalización entre israelíes y palestinos. En los últimos años se cancelaron muchos eventos de este tipo, bajo la afirmación que está prohibido normalizar relaciones con Israel. La Autoridad Palestina, y estas ONGs, también coordinan sus actividades con otros grupos «anti-normalización» en el mundo árabe, en particular Jordania y Egipto.
Al final del día, son esas actividades las que conducen a los árabes a los brazos abiertos de los fundamentalistas musulmanes. La campaña «anti-normalización» sirve para socavar a la minoría de árabes moderados que todavía creen en la coexistencia y la paz.
El liderazgo palestino en la Margen Occidental se está disparando en el pie. En el futuro, sus representantes tendrán miedo de volver a la mesa de negociación o entablar un diálogo con Israel por temor de sus vidas. Si los académicos palestinos, como Nusseibeh, tienen miedo de aparecer en público con israelíes tales como Uri Avineri, Ruth Dayan y Shlomo Ben-Ami, dice mucho sobre adonde se dirige la sociedad palestina.
(Traducido para porisrael.org por José Blumenfeld)