“Kippot for Hope “ y la historia de los judíos en Uganda

COMUNIDAD

El Presidente de la República, Sebastián Piñera vistió una especial “ kippá “ durante la Tefilá por Chile realizada el 11 de octubre último en la Sinagoga del Círculo Israelita de Santiago. Fue un regalo del Presidente de la Comunidad Judía, Shai Agosin quien al entregársela le expresó que fue tejida por mujeres de la Comunidad Judía de Uganda quienes participan del proyecto “ Kippot for Hope”.

¿Cuán es el origen de esta comunidad judía africana?.

Aquí su historia:

—–

En 1919, un líder cristiano de Uganda llamado Semei Kakungulu, decidió que sentía una conexión más fuerte con el Antiguo que con el Nuevo Testamento. Cuando le dijeron que ése era el Libro de los Judíos, proclamó: «Entonces vamos a ser judíos». Declaró a su tribu entera judíos y circuncidó a sus hijos y a él mismo. A inicios de la década de 1920 visitó a la comunidad un judío estadounidense, que se quedó con ellos durante seis meses. Él les enseñó acerca de las fiestas, el calendario y las leyes de kashrut. También contribuyó a la creación de una escuela, con el propósito de transmitir conocimientos sobre judaísmo y habilidades pedagógicas.

A estas personas se las conoció como Abayudaya (“El Pueblo de Judea”). Sin embargo, durante la persecución en la época de Idi Amin, casi el 90% de la población se vio obligada a convertirse al cristianismo o al Islam. Quedaron aproximadamente 300 miembros, comprometidos con el judaísmo, y rezaban en secreto.

Hoy en día hay casi un millar de judíos Abaudaya, divididos en seis pequeñas comunidades repartidas en 100 kilómetros al este de Uganda. Hay una comunidad central que tiene su propia casa de huéspedes, donde acoge a visitantes, y está comprometida con aumentar los conocimiento de la comunidad sobre judaísmo y el mundo exterior. La comunidad es intensamente judía, todos ellos tienen nombres hebreos, y hombres y niños usan sus kipot de colores brillantes hechos a mano con orgullo. Los Abaudaya oran y cantan con emoción y entusiasmo.

El rabino de la comunidad central, Rabino Gershom Sizomu, fue ordenado en 2008, convirtiéndose en el primer rabino Abayudaya y Gran Rabino de Uganda.

Adam Williams, creador del proyecto «Kippot for hope» fue premiado el 15 de noviembre de 2010 con el premio «Norwood Helping Hands Award», como reconocimiento a su labor con la comunidad Abayudaya de Uganda. Aquí  el discurso de aceptación:

«Fundé Kippot for Hope en 2009 después de pasar una noche de séder con los judíos de Uganda. Vi muy claramente cuán desfavorecidos estaban. Estas personas son hermanos judíos que viven en cabañas de barro, sin electricidad ni agua potable, y cuya única comida es la que crece cerca de sus casas. Vi también las hermosas kippot que tejían, y quise crear un mercado para que pudiesen venderlas por todo el mundo.

Tengo planes de trabajar con la comunidad, para implementar varios projectos de desarrollo, que se financiarían con los beneficios obtenidos. Quería que este proyecto fuese sostenible y generase ingresos, además de responder a sus necesidades básicas; así que contacté con todas las organizaciones judías, sinagogas, grupos de jóvenes, revistas universitarias y periódicos que pude; diseñé y construí la página web de Kippot for Hope y esperé a que corriera la voz.

Desde que empezamos hemos vendido más de 1800 kippot. Primero pagamos a las familias que las tejen, el resto se destina a un fondo comunitario. De esta forma ayudamos a obtener un ingreso extra para las familias, que éstas utilizan para enviar más niños a la escuela, comprar medicinas… El concepto es ayudar, no dar caridad.

También es un proyecto a largo plazo: no quiero que Kippot for hope sea simplemente una iniciativa que produce dinero para esta comunidad, sino que los beneficios se usen de manera eficiente y sostenible en programas que puedan ayudarles mucho tiempo después de que las ventas de las kippot se hayan agotado.

Comenzar nuestra plantación de piñas costó 500 libras, y eventualmente reportará a la comunidad casi 2000 libras anuales en ventas. El programa de energía solar que implantamos recientemente, para reemplazar las rudimentarias lámparas de kerosene, es no solamente beneficioso para el medio ambiente y para la salud, sino que la comunidad ahorrará más de 500 libras anuales, que se gastaban hasta ahora en combustible.

Hay muchos otros proyectos como éste que queremos realizar en el futuro. A corto y medio plazo: más programas agrícolas, ampliación de la sinagoga y proyectos de aguas. A largo plazo, me gustaría establecer una clínica de salud y una escuela primaria judía en la comunidad.

Es un gran honor ser elegido para este premio. Estando tan lejos del Reino Unido no esperé estar entre los candidatos, pero mi trabajo con Kippot for hope ha tenido claramente un impacto en los miembros del panel de selección, que me nominaron y escogieron entre centenares de extraordinarios candidatos.

Espero que ganar este premio contribuya a dar a conocer Kippot for hope y a la comunidad judía que estamos intentando apoyar. Muchas gracias a todos.»

Suscríbete a nuestroNEWSLETTER

Ingresando tus datos aquí, y recibirás noticias y novedades de CJCH en tu mail.