Netanyahu afirmó que los palestinos no se apartan de sus posiciones en las negociaciones por un acuerdo de paz
Israel
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que el negociador palestino Saeb Erekat «no se mueve” en sus posiciones y el enfoque hacia las conversaciones de paz con Israel. Erekat y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, exigieron que Israel detenga la construcción de asentamientos y establecieron otras condiciones previas a las negociaciones directas.
El primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó hoy lunes que el negociador palestino Saeb Erekat «no se mueve de un nanómetro» en sus posiciones y el enfoque hacia las conversaciones de paz con Israel.
Erekat y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, exigieron que Israel detenga la construcción de asentamientos y establecieron otras condiciones previas a las negociaciones directas.
En declaraciones realizadas en las comisiones de Asuntos Exteriores y de Defensa de la Knesset, Netanyahu acusó a Erekat de romper un acuerdo de no realizar declaraciones públicas sobre las conversaciones que tienen lugar en Amman entre las dos partes.
Respecto del plazo fijado por el Cuarteto para Medio Oriente, que fue otro de los puntos de discusión entre Israel y la Autoridad Palestina, Netanyahu explicó que de acuerdo a Jerusalem, el reloj no comenzó a correr hasta después de la primera reunión entre ambas partes celebrada el pasado 3 de enero.
De acuerdo con este cálculo, la fecha límite es el 3 de abril, en comparación con la fecha límite declarada por los palestinos fijada para el 26 de enero.
Israel, dijo el primer ministro, aprobó un documento de 21 puntos a los palestinos a principios de este mes.
Cuando se trata de conversaciones de paz, sostuvo Netanyahu, «los tratados son buenos, pero en nuestra realidad, la seguridad está antes que la paz».
Netanyahu también especificó las acciones que Israel debería adoptar contra Irán para detener su impulso hacia la proliferación nuclear.
Hasta que no haya «sanciones reales y efectivas contra la industria petrolera de Irán y el banco central, no habrá ningún efecto real sobre el programa nuclear de Irán», consideró el primer ministro israelí.
