Blindando fronteras sudamericanas
Ciencia y Tecnología

Son fabricados en Israel, comprados por Brasil y podrán sobrevolar Bolivia según un acuerdo a punto de cerrarse. Se trata de los aviones no tripulados Heron 1, destinados al narcotráfico. Autoridades de Brasil y Bolivia se aprestan a ultimar en La Paz los detalles de un pacto que habilita el uso de Vehículos Aéreos No Tripuados (Vants) de la Policía Federal brasileña en cielos bolivianos. Los aparatos están equipados para capturar y transmitir imágenes de tierra volando a kilómetros de altura
Hasta ahora se asociaron Brasil y Bolivia en la utilización de los Vants, y tal vez se extienda a otros países. Son aviones con aparatos sofisticados de investigación y de observación: desde aerofotografías hasta radares sofisticados para detectar pistas (y) zonas» cultivadas
La compra de Vants a Israel fue anunciada por Brasil a fines de 2009. Al comienzo se indicó que la adquisición para reforzar la vigilancia doméstica y fronteriza de Brasil alcanzaría a 14 aeronaves Heron, fabricadas por Israel Aerospace Industries. Hasta ahora la policía brasileña compró dos de esos aviones, uno de los cuales fue entregado a fin de año.
«Las informaciones relacionadas con los términos en que debe ocurrir la cooperación operacional con Bolivia son sigilosas y, sobre las acciones del Vant, el DPF (Departamento de Policía Federal) no se pronunciará”.
Se estima que la mayoría de la cocaína que produce Bolivia se dirige a Brasil, el segundo mayor consumidor mundial de esa droga y de crack, un derivado de la misma que es considerado un problema creciente en el país.
La Policía Federal brasileña indicó que el modelo de avión no tripulado que adquirió mide 16,6 metros, pesa 250 kilos y puede alcanzar una altura de 30 mil pies, equivalente a unos nueve kilómetros. El Vant es capaz de volar 37 horas ininterrumpidas, cubriendo más de 1000 km. Durante el vuelo, el aparato puede fotografiar o filmar personas u objetos (…) con nitidez», precisó. Se controla a distancia por medios electrónicos y computación. La información que transmite pasa a una sala de situación. Una sala para esa finalidad está a punto de ser inaugurada en Brasilia, mientras la base de los aviones está en São Miguel do Iguaçu, cerca de la triple frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay. ( cidipal.org )