Voraz incendio en Jerusalem obligó a la evacuación de 200 hogares barrios, hospitales y el Museo Yad Vashem

Israel

Decenas de unidades de bomberos combatieron los incendios en Jerusalem y se trabajaron seis aviones y dos helicópteros para evitar que el fuego se propague en el Bosque de la capital israelí, que trajo como consecuencia la evacuación de más de 200 hogares en los barrios de Ein Kerem y Kiryat Hayovel. También el Museo Yad Vashem fue cerrado con el fin de evitar mayores consecuencias luego de casi siete horas de duración del incendio.

Si bien no se registraron heridos graves, numerosas personas fueron atendidas por los paramédicos del servicio de emergencia Magen David Adom por inhalación de humo.

«El fuego se ha contenido, pero no se ha extinguido por completo», dijo el portavoz policial Micky Rosenfeld Israel. «Cientos de bomberos y policías permanecen trabajando aún en el lugar”, agregó.

Rosenfeld sostuvo que la causa del incendio se desconoce y señaló que la investigación se ha puesto en marcha.

Debido a la extensión del fuego durante toda la tarde, el personal del Centro Médico Shaare Zedek organizó dar cabida a la afluencia de pacientes a la Universidad Médica de Hadassah en Ein Kerem.

Los bomberos de todo el país se reunieron para luchar contra el incendio y fueron enviados cientos de agentes de policía para garantizar la seguridad de miles de residentes de los barrios en peligro.

La policía cerró las calles cercanas al fuego y el tren ligero fue cerrado temporalmente, entre la plaza de Dinamarca y el Monte Herzl.

Varias casas en Ein Kerem y Kiryat Hayovel fueron dañadas durante el incendio y el Museo Yad Vashem y todos los hospitales de la zona no sufrieron consecuencias. Como precaución, la compañía eléctrica de Israel interrumpió el servicio en gran parte de la zona para evitar un peligro mayor.

Asaf Finkelstein, portavoz de Aley Siach, una organización que cuida las casas de los niños con discapacidad, sostuvo que hasta 40 niños que viven en dos casas en Kiryat Hayovel fueron evacuados a un refugio alternativo en la capital.

«Todo el barrio está bajo una nube ahora y los niños tendrán que pasar la noche en un ambiente extraño. Nos dijeron que no podemos regresar hasta que se extinga el fuego», afirmó.