Organización israelí devuelve agua potable a pueblos afectados por un huracán en Puerto Rico

COMUNIDAD, Israel

Itongadol/AJN

Un año después de que el huracán María arrasara Puerto Rico, todavía muchos habitantes de la isla viven sin electricidad ni agua potable, especialmente en zonas de montañas. Y es en esas áreas donde 12 meses más tarde continúa la labor de organizaciones que trabajan en ayudar a que los afectados vuelvan a tener una vida normal. Una de las organizaciones que acudieron primero cuando se desató la emergencia, y que sigue presente en la isla, es IsraAID, una organización sin fines de lucro con base en Tel Aviv.

 

El trabajo de IsraAID se ha centrado en los poblados de Cantera, Loiza, Canovanas y Toa Baja, donde se registraron los peores daños y donde la mayoría de los habitantes son de bajos recursos.

 

LA ONG israelí se dispuso a devolverle a estos poblados el aprovisionamiento de agua potable, una de las prioridades inmediatas durante la labor de reconstrucción. Para esa tarea su equipo instaló tanques de agua y una nueva central eléctrica.

 

El primer lugar donde restablecieron el agua fue el barrio Real, en el distrito municipal de Ponce, una región rural al sur de Puerto Rico. Después de que el huracán María destrozara la fuente principal de agua de la comunidad, los habitantes del barrio se quedaron sin acceso a agua potable. El líquido embotellado tardó siete días en llegar a las pueblos de montaña más remotos donde, durante ese tiempo, solo pudieron acceder a la insalubre agua del río. IsraAID distribuyó filtros temporales para los hogares en las primeras semanas tras el desastre, en septiembre del año pasado. Más de 6000 habitantes de poblados remotos se beneficiaron por los filtros que la organización repartió en esa primera fase.

 

A comienzos de octubre de 2018, IsraAID y la Universidad Interamericana de Puerto Rico finalizarán la construcción de un nuevo sistema de filtrado de aguas en el barrio Real, una pequeña comunidad rural a la que no llega el sistema de aguas de la isla.

“Continúa la labor de respuesta ante los efectos de la devastadora tormenta porque muchas familias aún no tienen agua o electricidad y cientos de personas necesitan apoyo vital ya que aún están procesando el trauma de perder sus hogares y a sus seres queridos”, explica Yotam Polizer, el jefe ejecutivo de IsraAID, al medio puertorriqueño El Diario.

 

Tras esta primera fase de respuesta a emergencias, el equipo de IsraAID ha trabajado sobre el terreno para desarrollar programas a largo plazo que ayuden a acompañar a los puertorriqueños en su camino hacia la recuperación y la sustentabilidad.

 

El Huracán María dejó un saldo de 2975 víctimas mortales, aunque se cree que la cifra ronda los 4500. IsraAID fue una de las primeras organizaciones que llegó al lugar con su equipo de emergencia para ayudar a los sobrevivientes del desastre. Más de 6000 personas se beneficiaron con sus filtros de agua. Seis clínicas médicas móviles fueron levantadas por la ONG israelí para atender a cientos de personas, proporcionar apoyo en salud mental y formar al personal de hospitales de la región en el tratamiento de traumas. Gracias a la colaboración entre IsraAID y ASPIRA, una organización puertorriqueña que proporciona escolarización, 3400 jóvenes recibieron educación alternativa en las semanas posteriores al huracán.

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