Señor Director:

El 5 de diciembre, la Contraloría General de la República -en respuesta a una presentación jurídica de la Comunidad Judía de Chile, que dirijo- declaró ilegal la decisión del Concejo Municipal de Valdivia, que buscaba boicotear a Israel, sumándose a la Campaña Internacional de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) a ese país

Así, el dictamen echó por tierra lo establecido en junio por el municipio: «La Ley N° 20.609 prohíbe la discriminación arbitraria que se sustente en consideraciones como la nacionalidad y que cause una privación, perturbación o amenaza del ejercicio de los derechos fundamentales garantizados en los cuerpos normativos que indica».

En mérito de lo expuesto, agrega, «esta Contraloría General debe concluir que la Municipalidad de Valdivia no se ha ajustado a derecho al adoptar el acuerdo N° 277, de 2018, y dictar el decreto alcaldicio N° 5.106, de la misma anualidad».

El fallo no solo obliga a Valdivia a abstenerse de sus intentos de establecer un gobierno solo para algunos, sino que lo hace obligatorio para todo el país.

De esa forma, Chile se convierte por ley en el primer país latinoamericano libre de BDS a nivel municipal: en Chile, el BDS ahora es ilegal.

El fallo tiene una dimensión histórica: marca jurisprudencia al sentar las bases legales para que minorías de todo tipo se defiendan frente a exclusiones de entidades públicas. A su vez, entrega una fuerte señal a las autoridades, en el sentido de que en el territorio nacional no hay lugar para decisiones fundadas en la segregación.

Así, el ente contralor se hace eco del espíritu que existe en nuestro país y entre sus habitantes: en Chile no hay espacio para el odio, la discriminación ni el antisemitismo.

Shai Agosin W.
Presidente Comunidad Judía de Chile