Para Putin, Israel es modelo de unidad para ucranianos y rusos

COMUNIDAD, Mundo Judío

Por Silvia Schnessel
(JTA)
CNAAN LIPHSHIZ
A Vladimir Putin claramente le gusta hablar de judíos e Israel.
Esta vez sugirió que Israel ofrecía un buen modelo para sus diseños en Ucrania.
Mirando hacia atrás, en un panel sobre energía en 2017, el presidente ruso Putin lanzó una broma de 90 segundos sobre un soldado israelí sabelotodo que fue interrogado por su comandante sobre cómo enfrentarse a múltiples enemigos. El consejo del soldado: envíe más tropas.
En 2019, oyendo hablar sobre los desafíos financieros de un rabino en Crimea, Putin bromeó: “¡Entonces los judíos tienen problemas con las finanzas!” Luego le dijo al rabino “Todá rabá”, que en hebreo significa “muchas gracias”.
Pero el último comentario de Putin, que hizo el martes por televisión, fue un poco más allá, brindando una visión poco común de cómo piensa sobre el pueblo judío. Esencialmente sugirió que los pueblos eslavos sigan el ejemplo de los israelíes y se unan como un solo pueblo a pesar de las diferentes etnias, orígenes y lenguas maternas.

En su conferencia de prensa anual en vivo de preguntas y respuestas, preguntaron a Putin por qué Rusia no ha clasificado formalmente a Ucrania como país hostil a pesar de la guerra de baja intensidad entre los dos países desde 2014.
“Porque no creo que el pueblo ucraniano sea un pueblo hostil con nosotros”, respondió el líder ruso, y agregó que los ucranianos y los rusos “son generalmente un solo pueblo”.
Putin pasó a ofrecer a Israel como modelo.
”Mire, los judíos vienen a Israel de África, de Europa, de otros países del mundo. Los africanos son negros, ¿no? La gente viene de Europa, hablan yiddish, no hebreo. Parecen ser diferentes entre sí, pero de todos modos, el pueblo judío valora su unidad”, dijo.
Putin ha tenido fuertes lazos emocionales con los judíos rusos que se han reflejado en una serie de políticas favorables. Bajo Putin, las autoridades han tomado medidas enérgicas contra los crímenes de odio antisemitas y las comunidades judías han recibido el equivalente a millones de dólares en restitución por propiedades confiscadas por los comunistas, lo que ha contribuido a impulsar un renacimiento cultural y religioso.
El primero de esos contactos fue con una familia judía que vivía en el bloque de apartamentos de su familia en Leningrado, ahora San Petersburgo. Ayudaron a cuidar a Putin cuando era niño con sus padres trabajando largas jornadas.
“Eran judíos observantes que no trabajaban los sábados y el hombre estudiaba la Biblia y el Talmud todo el día”, escribió Putin en una de sus biografías. “Una vez incluso le pregunté qué estaba murmurando. Me explicó qué era este libro y de inmediato me interesé”.
Otra figura judía influyente de Putin fue su entrenador de lucha libre, Anatoly Rakhlin, quien despertó el interés del joven Putin en los deportes y lo sacó de las duras calles de Leningrado, donde Putin se metía en peleas mientras sus padres trabajaban. En el funeral de Rakhlin en 2013, Putin se sintió abrumado por la emoción y abandonó su destacamento de seguridad para dar un paseo corto y solitario.
En 2014, durante una visita a Israel, conoció a su ex maestra de alemán, Mina Yuditskaya Berliner, otra figura influyente en su vida porque ella le dio las habilidades lingüísticas que luego lo ayudaron a escalar en las filas de la KGB. Tuvieron una charla de dos horas en su apartamento alquilado; después le compró el lugar.
Berliner dejó a Putin el apartamento en su testamento y se lo devolvieron después de su muerte en 2018.
Las dos principales organizaciones comunitarias judías de Rusia ven a Putin como una fuerza amiga para los judíos rusos. Al mismo tiempo, decenas de miles de judíos rusos comenzaron a irse en los últimos años cuando Putin reforzó su control sobre los medios de comunicación rusos, los tribunales, las personas LGBT, otras minorías y lo poco que queda de libertad de expresión.
En cuanto a la comparación con Israel, los ucranianos tienden a no estar de acuerdo en que “los ucranianos y los rusos son un solo pueblo”, como dijo Putin el martes. Un sitio de noticias en pro de la democracia en Kiev calificó a Putin de “récord batido” al respecto.